Esta fiesta se celebra el 28 de Enero en honor a santo Tirso, mártir del siglo III, patrón de las enfermedades de huesos.
Se encuentra ya documentada la existencia de la ancestral hoguera en el siglo IX, a través del libro de Francisco de LLano y Ovalle "Flores del Bierzo lozanas y mustias" publicado en ,1896, donde nos habla de la gran raigambre que ya tenía esta fiesta en la época.
La fiesta tiene una duración de dos días, encendiéndose la hoguera, al son de las bombas y cohetes, la víspera por la tarde. Todos los participantes que así los deseen degustan los típicos chorizos cocidos, todo ello amenizado por una orquesta. El día grande de la fiesta, el 28 de Enero, comienzan las celebraciones con repique de campanas y disparo de bombas y cohetes.
Al mediodía sale la procesión del santo de la Iglesia de San Francisco, seguida de sus cientos de devotos, recorriendo las calles de la villa para regresar al templo de San Francisco, donde se celebra la Eucaristía.
Posteriormente bailes en la Plaza Mayor a cargo de la orquesta.
Es ya tradicional en casi todos loS hogares villafranquinos para ese día preparar el típico botillo acompañado de repollo y chorizos.
La organización de la fiesta corre a cargo del Ayuntamiento de la villa